La medida apunta a "garantizar los derechos" de estudiantes a ser evaluados desde una "mirada integral, flexibilizada y con centralidad en la enseñanza".
El Consejo General de Educación (CGE) de Entre Ríos modificó el sistema de evaluación, calificación, acreditación y promoción para los estudiantes secundarios de la provincia, y los docentes no podrán colocar una nota menor a 4 en el primer trimestre, explicaron desde el organismo.
Al no alcanzar el 6, la institución educativa deberá gestionar acciones de “acompañamiento pedagógico y de complementación”, advirtieron.
El objetivo de los cambios es “garantizar los derechos” de estudiantes a ser evaluados desde una “mirada integral, flexibilizada y con centralidad en la enseñanza”.
Por eso, se mantiene la aprobación entre 6 y 10 y la “no aprobación” entre 1 y 5, pero la calificación del primer trimestre estará comprendida entre 4 y 10, debido al “impacto subjetivo” que tienen las notas 1, 2 y 3.
Esas calificaciones, según el CGE, “obturan la trayectoria a realizar durante el año desde el inicio del proceso de aprendizaje”.
Por eso, a cambio, recibirán un informe descriptivo con los saberes y capacidades pendientes de acreditación, y con las particularidades de su proceso de aprendizaje, fortalezas y debilidades, para tomar decisiones y así disminuir o superar esas dificultades.
La evaluación forma parte de un “proceso formativo” que acompaña la trayectoria escolar de los estudiantes, y es una herramienta de los docentes para “conducir la enseñanza de manera efectiva, retroalimentar aprendizajes, y comunicar los resultados”, consideraron.
Por otro lado, los docentes deberán trabajar en una acreditación de saberes “procesal, progresiva, variada e integrada”, y donde cada docente elegirá la forma de registrar acreditaciones a través de conceptos, números u otros símbolos.
Incluso, la nueva normativa insta a que los y las estudiantes “aprendan a hacer sus registraciones” sobre la acreditación de saberes.
Al respecto, la directora de Educación Secundaria de Entre Ríos, Natalia Garnier, señaló que la medida busca “evitar el impacto negativo” de la calificación de 1 a 3, a través de una “evaluación continua, formativa, y con foco en la observación de evidencias de los procesos diarios”.